Discuto, me enfado, me riñes, lloro, desesperas, corro, me sigues, me paro, me abrazas... Sabes que soy difícil, pero lo que tú me has llegado a enseñar es mucho más de lo que nunca te he pedido o he llegado a imaginar. Al fin y al cabo, mi mente no da para más. Quieres sacar de mí lo mejor y lo intentas día a día. Cada rato que pasas conmigo es como un duelo. ¿Nunca nos vamos a poner de acuerdo, ¿verdad? ¿Cuándo voy a poder decir que pensamos lo mismo?
Con todo esto solo quiero que sepas que algun dia, cuando yo ya sea mayor, te pediré consejo, y necesitaré que estés a mi lado. Mira, la vida no es eterna y llegará un momento en que tú no estarás conmigo. Y ese día, con lágrimas en los ojos, tendré que decir que echo de menos lo que un día eche de más.
¡Gracias mamá!

0 comentaris: